Resulta que Antena 3 de radio, la mítica cadena de emisoras, la primera cien por cien privada en España, la primera que apostó por la FM -sería de risa rescatar a todos los profesionales que de costa a costa dijeron que era una locura emitir programas generalistas por la FM- y, sin duda, la más innovadora de su momento; en aquellos meses estaba siendo desmantelada en su contenido por un politiquerío infame. De allí habían salido sus grandes estrellas y se habían quedado unos cuantos inasequibles al desaliento, profesionales irrepetibles que hicieron, durante los pocos meses que quedaron entre el antenicidio y su clausura definitiva una radio de primerísima división. El gran Miguel Ángel García Juez o Javier Ares y su increíble equipo en las retransmisiones ciclistas. Hasta Marlasca, que le imprimió a El primero de la mañana un ritmo informativo que, desde entonces, creo que no se ha repetido en la radiofonía actual. Qué panda.

En aquel macroprograma de música y entrevistas, comentarios y desvaríos en general, había de todo menos cine, pero sobre todo, resultaba espectacular porque a las cuatro de la tarde, a las cuatro más los informativos, colocaba un villancico. Aquellos gotarrones de sudor, las chanclas y las bermudas, la nostalgia piscinera, la caza del avieso mosquito, de pronto, salía Bing Crosby cantando Blanca Navidad y uno que quedaba helado. O el Rat Pack, o Raphael y el Tamborilero. Y claro, cómo no quedarse helado. La Navidad presente incluso entonces, en mitad del fragor veraniego, del cocimiento generalizado, la añoranza del turrón y de los polvorones, hacia Belén va una burra, rinrin, y pasando unos calores que pa qué.
El festival de Belenes, y nosotros sin saberlo.
4 comentarios:
A mí me gustaba un programa de García Juez que se llamaba "El abanico". Era muy distraído. Y Ana Rosa Quintana aún no iba de Ofra.
Había calidad y rigor.
Jo, qué tiempos, si, Dulci.
Así de pronto, "El abanico" iba más con los aires veraniegos que el villancico.
De todos modos no hay más que calcular los "tiempos" y los "programas" para saber las estrellas que tenemos,así que cuidadín.
Luisa
Nada de lo que dices me suena, ni Pumares, ni García Juez, ni el tal García. Serán de tu época, majo.
Oquendo, Oquendo...eso sí que me resulta mas familiar.
Anda que no estás chalao: que si los Belenes, Agosto, Pumares y
el Almirante Oquendo: no sé que otra cosita mas disparatada podrías relacionar.
Y yo tan pichi confiando que en agosto, sujetabas tú mi vela (y la de algunas otras)
Qué tio!
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