Os presento a Giovanni, el Guardia Suizo encargado de custodiar el belencito doméstico. No forma parte del conjunto, obviamente, pero al instalar el portal en el lugar que él ocupa normalmente, ya no le buscamos otro sitio. Y aunque a nosotros nadie nos rapta al Niño Jesús, como en la Plaza Mayor, lo hemos dejado para que anuncie las visitas que tenga la Sagrada Familia durante estos días sucesivos. Desde que hace un par de años lo vi en un estante de aquella tienda de Roma, junto con otros tantos congéneres, supe que tenía que regresar conmigo en la maleta. ¿A que tiene cara de majete?
Un besote a todos y FELIZ NAVIDAD.
10 comentarios:
Altea, me encanta la adquisición.
¡Feliz Navidad!
Hum... ¿Te suena lo del musgo y el corcho y los ríos de papel de plata? Desde luego, te curras poco el Belén, ja, ja, ja...
Ni caso a Néstor, que como vive en el ocio puro tiene tiempo de recrear la batalla de las Ardenas como decorado. Aúpa el minimalismo con suizo incorporado!!!
Jo, es que no tenemos sitio, de verdad. Nuestra casa tiende a ser más bien recogidilla.
Feliz Navidad Alte, que bonito misterio y que bien custodiado.
jua, jua, jua, qué idea más buena.
A ver si encuentro uno cuando vaya a Roma. Y lo planto como tú, a pie de Portal.
Por cierto, vaya barrigón tiene el tío. Me recuerda a Sancho Panza.
Hum... Está bien, ALTEA, está bien: me guuuuusta tu Belén.
Néstor, me imagino el tuyo hasta con párking para bicis :-)
Pero bueno, a quién le tocaaaa??? Que para mañana hay rifaaaa!!!!
Es verdad, se han ido perdiendo los turnos, pero Néstor hace mucho que no nos cuenta algo...
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